Tamborileros de Aznalcázar y de Villamanrique participaron en el homenaje a Miguel Hevia, símbolo de la tradición en el municipio.
El Ayuntamiento de Aznalcázar ha realizado un homenaje a Miguel Hevia, desaparecido tamborilero del
municipio, símbolo de esta tradición local, durante la inauguración de la Plaza Virgen del Rocío.
Al
homenaje asistió la Corporación Municipal y los representantes de las distintas asociaciones
locales, así como el Delegado de Cultura, Educación y Deporte Francisco Díaz Morillo.
El acto
comenzó con la bendición por parte del Párroco D Francisco Diz Lois de las esculturas de la Virgen
del Rocío y de Miguel Hevia, que desde el domingo presidirán esta Plaza. A continuación, numerosos
tamborileros del pueblo y de la vecina Villamanrique hicieron su particular homenaje a Miguel
entonando El Alba con el tambor y la flauta para dar paso, tras su actuación, a los artistas
aznalcaceños que han creado las esculturas y los azulejos artesanos que adornan esta plaza, Antonio
García Villarán y Jesús García Rodríguez, respectivamente.
Francisco Díaz, en su intervención, alabó este tipo de iniciativas recordando que así se hace cultura, engrandeciendo las tradiciones y dándoles un lugar privilegiado en las calles de los pueblos y en la memoria de los vecinos.
Por último, la alcaldesa Dolores Escalona, cerró el acto haciendo hincapié en que "éste es otro de los homenajes que el actual equipo de gobierno quiere realizar a las tradiciones del pueblo y a sus personas ilustres porque son ellos los que hacen la historia de Aznalcázar". Ya se realizó la Plaza de la Mujer Trabajadora y se puso el nombre de los hermanos Ignacio y Francisco Mora a la biblioteca municipal y, tras el homenaje a los tamborileros a través de la figura de Miguel Hevia, se continuará con esta labor para "encumbrar nuestras costumbres y tradiciones".